jueves, 28 de febrero de 2008

Lejos de tí / A tu lado

La noche llega como un manto de negrura eterna que amenaza con ahogarme. Otra noche más de soledad, lejos de tí. Mañana será otro día. ¿Y qué más da? Será otro día vacuo, otro día en el que deshojaré las horas como los pétalos de una margarita marchita. Otro día más solo. Ya apenas recuerdo los buenos momentos, las noches en las que reposabas sonriente sobre mi pecho desnudo, se los ha llevado la marea de la desesperación igual que arrastran las hojas a los trozos de madera reseca. Otra noche, otra pesadilla. Una vez más, un deseo, en realidad el único que me importa: que la propia realidad de mi vida no sea más que un espejismo. Que un día despierte y me vea reflejado en tus ojos inquisidores. Que tu respiración suene junto a la mía y tu sonrisa sea la misma que hace años. Que el dolor que ha rasgado mi alma desde que te perdí no haya sido más que la retorcida imaginación de mi subconsciente. Sólo desearía... que amanecieses de nuevo a mi lado.

Sarg

El día ha amanecido gris oscuro y con niebla y tú amenazas tormenta mientras me observas desde lejos, desde más lejos que el dios de los rayos y los truenos. Me gustaría que estuvieras aquí abajo, en la tierra, convirtiendo el mundo de los mortales en un reflejo de tu olimpo inmortal. Me estremezco con el roce de tus manos ausentes y cierro los ojos para imaginar que otra vez estás pegado a mí, mi espalda entre tus brazos, acariciando tu vientre, con el cuello erizado de tu aliento. Otra noche, otro sueño. Otra vez un deseo, el más importante, en realidad el único que me importa: que tu lado de la cama no esté frío. Ver mi reflejo en tus ojos cuando me decida a abrirlos. Tus latidos taladrándome el oído. Tu sangre a borbotones mezclándose con la mía. Tus mordiscos dejando marcas violetas en mi piel. Tú conmigo, y tus besos… Otra hora: te deseo. Y el deseo se convierte en motivo suficiente para cambiar la realidad. Y amaneces a mi lado…

Vir

3 comentarios:

David Martín dijo...

Dos versiones del anhelo... Me gusta. Qué cosa más cabrona y agridulce.

Muy bueno!!! ;)

Anónimo dijo...

Claro, claro, aquí ves "anhelo" y en el mío "sexo"...
Anda que... :P

David Martín dijo...

XDDDDD. Buena apreciación, V. XDDDD. Corrijo: "dos versiones del anhelo, con una profunda carga sexual en la parte de Vir". CORRECTO. :PPPPPPPPP